No hay billetes reservados ni alojamiento para hacer realidad esa escapada tan deseada y el tiempo se echa encima. Lo mejor, en este caso, es relajarse, abrir la mente y no empeñarse en una opción única de viaje, ya que es entonces cuando los gastos se disparan y se acaba frustrado en casa. Para evitarlo, aquí van algunas recomendaciones.

Inspirarse

Si no se tiene muy claro adónde se quiere ir, hay que dejarse llevar y buscar sin destino. Hay páginas webs, como la del buscador de viajes Skyscanner, que permiten desplegar el mapa del mundo y recorrerlo de forma virtual para comprobar los precios de los vuelos en cada lugar. Es una forma sencilla y rápida de encontrar opciones atractivas que se salen de lo habitual y que, de otra manera, sería imposible haberse planteado.

Mejor en domingo

Según un informe de Expedia, en asociación con la Corporación de Informes Aeronáuticos y otras fuentes como IATA y Diio Mi, los fines de semana y sobre todo el domingo es el mejor día para reservar un billete. El peor día para hacerlo es el viernes, ya que la demanda se dispara y con ella, los precios. Además, este informe avisa de que reservar el vuelo y el hotel en el mismo pack, es una opción más económica que hacerlo por separado.

Comparar aeropuertos

Si el viaje requiere traslado en avión, conviene tener en cuenta, además de las escalas, la variación de precios de un aeropuerto a otro, según su cercanía a la ciudad. Además, hay que informarse del coste de los medios de transporte para el traslado a la ciudad y añadirlo al presupuesto, sobre todo si se escoge la opción más alejada del destino.

Ponerse en alerta

Internet es una gran aliada a la hora de buscar destinos a buen precio. Las alertas de distintos comparadores de precios y webs especializadas en viajes permitirán estar al tanto de las fluctuaciones en los precios para ‘cazar’ la mejor oferta.

Colaborando

La economía colaborativa puede ser de gran ayuda para encontrar transporte y alojamiento a buenos precios. Darse una vuelta por las webs de BlaBlaCar, Amovens o CouchSurfing, puede suponer un alivio económico y una solución eficaz para los que se han retrasado a la hora de organizar sus vacaciones.

Y para la próxima vez…

Planificar con antelación el viaje siempre es un valor seguro para lograr buenos precios y mucha tranquilidad. Según un estudio de Skyscanner, lo más recomendable es comprar los billetes de avión a destinos europeos, con seis semanas de antelación, para conseguir descuentos de hasta un 12%. En destinos nacionales, esta empresa recomienda reservar los vuelos con 13 semanas de antelación para beneficiarse de un 9% de media de rebaja en el precio.

Nunca hay que olvidarse de planificar el viaje en el aspecto financiero haciendo un presupuesto y controlando el gasto durante el tiempo que dure. De esta forma, se evitarán los nervios de última hora para encontrar una oferta que, a lo mejor, no llega y así se disfrutará de un merecido descanso con nuestra salud financiera en forma.

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